Regar periódicamente.
Quitar las malas hierbas.
Abonar en primavera y después de la floración.
El abono tiene que ser bajo en nitrógeno y alto en potasio y fosforo.
Nunca poner estiercol.
Transplantar cada tres o cuatro años, arrancando y separando los rizomas.
Enfermedades : Las hojas pueden tener manchas por hongos, hay que tratar con un fungicida.